miércoles, 11 de enero de 2012

Amor


Tú y yo nos encontramos en medio de mi huerto
Entre dos primaveras que brotan de tus ojos
Tú y yo nos atrapamos en un beso impoluto
Que enciende tus entrañas y mis orbitas
Tú y yo nos acercamos en cada amanecer
Para dar a la vida la redondez del mundo

Tu virginidad tibia me  sujeta tranquilo.
Me detiene tu vientre palpitante.
Entre el cielo y tu ombligo,  he aprendido
A calmar las  fatigas,  y  a saciar el  hambre.
Me han redimido tus manos y tu boca.
Mi corazón, un techo en tu amor  ha encontrado

No hay comentarios:

Publicar un comentario